¿Por qué implementar la Inteligencia Competitiva en tu estrategia de comunicación?

La Inteligencia Competitiva (IC) es una herramienta que pretende apoyar a las empresas en sus estrategias. Es un recurso que ayuda a las organizaciones a tomar decisiones precisas transformando los datos en información valiosa. 

Lee también:

>> 5 herramientas de relaciones públicas que llevarán tus campañas a otro nivel   

>> Cómo utilizar la estrategia de datos para cuidar la reputación de la marca?

>> Empresas basadas en datos: ¿por qué debería serlo también la suya?

Para que funcione, es necesario mantener un proceso continuo de seguimiento de la información sobre el mercado y los competidores de la empresa, además de generar análisis que posibiliten una rápida toma de decisiones.

Esta información, cuando se analiza e interpreta, se convierte en conocimiento para que las empresas tomen decisiones a corto, medio y largo plazo.

Incluso, según el informe de investigación 2021 de Business Future, en las próximas décadas existe una tendencia irreversible a que las organizaciones se conviertan en empresas científicas para beneficiarse de la próxima ola de innovación. En este sentido, el proceso de Inteligencia Competitiva se vuelve esencial.

Esta misma encuesta muestra que el 97% de los altos ejecutivos encuestados utilizan cada vez más las tecnologías digitales para acelerar la evolución, la innovación y adelantarse a la competencia.

En pocas palabras, se puede afirmar que la inteligencia competitiva tiene como objetivo anticiparse a las demandas del mercado. En esta estrategia, el propósito es llevar a cabo un proceso de análisis y captación de datos sobre la competencia.

En este contexto, las acciones de comunicación son mucho más precisas y eficaces cuando se basan en un estudio sistemático. El seguimiento de los medios de comunicación, por ejemplo, con ricos análisis de la información que interesa a la empresa, constituye un principio central de esta estrategia.

Los principios de la IC

Es importante destacar las diferentes etapas que permean la Inteligencia Competitiva y cómo estos procesos ayudan a la generación de conocimiento, ya que se constituyen a partir de una secuencia de acciones. Este ciclo se divide en 5 etapas:

  1. Definir los objetivos e informar sobre los cambios en el entorno, identificando las oportunidades y amenazas del mercado.
  2. Identificar las necesidades de información de la empresa y las fuentes de información y seleccionar las más relevantes.
  3. Almacenar los datos de forma segura y accesible.
  4. Analizar los datos y determinar el impacto potencial de los hechos detectados. Esto supone añadir valor a la información identificada como relevante e interfiere directamente en el posicionamiento y la competitividad de tu empresa.
  5. Distribuya la información y el análisis a las personas adecuadas para que puedan actuar estratégicamente ante la realidad de tu empresa.

En este podcast, por ejemplo, puedes comprobar una explicación sintética de por qué la Inteligencia Competitiva es tan importante para las estrategias de las empresas hoy en día.

¿Cómo no perder información relevante en el proceso de Inteligencia Competitiva?

Por un lado, los avances tecnológicos y la democratización de Internet han facilitado el trabajo de la Inteligencia Competitiva.

Sin embargo, el exceso de información disponible también requiere que la persona encargada de mapear la información sepa dónde buscar los datos, cómo transformarlos en información y no perder los importantes.

Incluso porque la información no recogida, pero vista por la competencia, o ignorada por los responsables de la toma de decisiones, puede suponer un gran problema para la marca.

En este sentido, el mapeo de datos puede realizarse a través de clientes, representantes, proveedores o competidores. Recurrir a bases de datos públicas también puede ser una buena alternativa.

Además, vigilar a los competidores en las redes sociales, lo que comentan los clientes sobre la empresa, lo que dice la prensa sobre su marca y los competidores es esencial para una buena estrategia de comunicación.

Para llevar a cabo esta tarea, es primordial invertir en la automatización de los procesos de recogida de datos. Además de optimizar el tiempo de investigación, reduce las posibilidades de que se pierda alguna información relevante y aumenta el potencial de la estrategia de comunicación de su marca.

Innovación e inteligencia competitiva

Sea cual sea el nicho de tu empresa, la innovación es un principio que no puede quedar en segundo plano. Al fin y al cabo, el ritmo de cambio del mercado es demasiado rápido para quedarse en la zona de confort.

Invertir en Inteligencia Competitiva es hablar de la búsqueda constante de la innovación.

Los mecanismos permiten identificar las necesidades de los clientes, adelantándose a la competencia, a un mejor coste y utilizando recursos tecnológicos más adecuados en el desarrollo de productos.

Si este proceso se lleva a cabo correctamente, tu empresa podrá ofrecer mejores soluciones al mercado.

La inteligencia competitiva ayuda a las organizaciones a anticiparse a los cambios del mercado, a conocer mejor a los competidores, proveedores y clientes y, por último, a la capacidad de innovación de la empresa. La información genera ideas creativas, formando la base de la innovación.

Por ello, el seguimiento de los movimientos del mercado, el análisis de la competencia y la inversión en la automatización de los procesos se han convertido en materias primas esenciales en el proceso de innovación.

Data Driven e IC

Muchos dirigentes siguen creyendo que la toma de decisiones estratégicas, basadas en datos concretos, no es tan importante en los resultados de la empresa.

La cuestión es que cada día el mercado se vuelve más competitivo debido a la mejora de los procesos tecnológicos de las marcas que buscan consolidarse en el mercado. En este escenario, la Inteligencia Competitiva es uno de los pilares de la Cultura Basada en Datos.

Y ser Data-Driven es una filosofía de funcionamiento en la que los datos están en el centro de todo el proceso de toma de decisiones de la empresa. Con esta estrategia, puedes conseguir una mirada mucho más cuidadosa de la información que necesitas analizar a diario.

Esto aporta resultados cada vez más asertivos para potenciar la competitividad de las marcas en el panorama digital. Como atestigua una encuesta realizada en 2019 por Crayon, las inversiones en inteligencia, que han aumentado un 39% este año, han hecho que los mercados sean mucho más competitivos.

¿Conoce las soluciones de Knewin para apoyar la Inteligencia competitiva?

Knewin cuenta con soluciones que apoyan el recorrido del monitoreo de la marca, la gestión de la reputación, el estudio de las noticias y la obtención de insights, el monitoreo de las redes sociales, las alertas de comunicación, los informes personalizados con reportes propios para la gestión de crisis, entre otras cosas que ayudarán en la construcción de la Inteligencia Competitiva de su marca.

Para saber más, ponte en contacto con nuestro equipo y aprovecha el potencial de la supervisión de la competencia. Habla con uno de nuestros expertos.